El email en digital es el rey como la televisión es la reina en off line, eso es indiscutible. Prácticamente todas las campañas de publicidad que realizamos contienen acciones email marketing. De hecho, nosotros mismos recibimos a diario varios emails con información y promociones más o menos interesantes. Por tanto, en un entorno digital, donde recibimos tanta publicidad a través de email, ¿cómo podemos elaborar una acción de email marketing perfecta?
El asunto importa más de lo que crees
Algunos expertos en email marketing aseveran que el «asunto» del correo que envías puede determinar en un 50% la tasa de apertura. El asunto de un email viene a ser como el escaparate de una tienda. Debes conseguir a través de una breve y sencilla frase, ser capaz de seducir al lector para que pinche en el email y te lea. Algunos puntos a tener en cuanta a la hora de redactar el asunto son:
- No escribas en mayúsculas. Las mayúsculas en on line se interpretan como gritar, y queda feo gritarle a alguien que quiere leerte ¿no crees?
- La intención lo es todo. Puedes ser sutil mediante un asunto tipo teaser, o bien ser obvio contando el beneficio principal del email. Pero decidas lo que decidas, escoge las palabras adecuadas.
- La extensión debe ser breve, a ser posible menos de 50 caracteres. Si te pasas, no se leerá el titular completo y eso será un gran error.
- Si tu base de datos te lo permite, personaliza el email con el nombre del receptor. Por ejemplo: «Carla, te traigo un regalo para que pases un verano genial».
- Puedes personalizar el asunto en una persona en vez de una empresa. Por ejemplo: «Luis de PDM tiene algo que contarte.»
Elabora un contenido atractivo
Antes que la imagen, que el diseño y que cualquier otro elemento, debes definir qué quieres comunicar. Por ejemplo, quieres dar a conocer un nuevo servicio que vas a lanzar al mercado. Lo que debes hacer es estructurar un único elemento a comunicar con diferentes mensajes que lo refuercen. Algunos argumentos que no pueden faltar en tu diseño son:
- Ventajas y beneficios de tu servicio. Bien claritas.
- Tu comunicación debe ser clara y veraz, de tal manera que generes confianza y necesidad de adquirir el servicio.
- Trata de elaborar mensajes innovadores, sorprendentes y atractivos. Recuerda que tu email es publicidad y el público está cansado de ser impactado a diario.
- Menos es más, opta por imágenes y titulares grandes. Evita usar demasiados mensajes, ya que puedes desviar su atención y confundirle.
Diseña creativamente, y con cabeza
Una vez tengas el guión claro, es el momento de diseñar una creatividad publicitaria eficaz en forma de email. Al igual que te pedíamos innovación en tus mensajes, también debes ser innovador en tu maquetación. Un email publicitario es una página diseñada en HTML, por lo que es realmente complicado que se vea correctamente en todos los dispositivos y servidores. Importante, evitar utilizar Flash y Javascript, ¡es un error!
Una foto impactante, los colores adecuados, o incluso un titular que funcione de foto, serán el telón perfecto para tu anuncio.
Motiva la acción
Nunca pierdas el objetivo de tu email, sea cual sea: llevar a una landing, informar, generar la compra de un producto o servicio, provocar una llamada, obtener datos del usuario… Para ello, deberás diseñar botones «call to action» que propicien la acción que buscas por su parte. Deben ser llamativos, diferenciados del resto de elementos, y reconocibles. Debes ser creativo, desde luego, pero no caigas en el error de que la originalidad le gane el pulso a los resultados.
- Debe tener una forma asociada a los típicos botones de descarga, compra, acceso a otro site, etc.
- El color debe ser llamativo pero coherente con el resto del layout, evita estridencias innecesarias.
- Incluye un texto que describa brevemente la acción que deseas que realice: «comprar ahora, descargar pdf, más información, llámame, etc».
Y por supuesto, siempre incluye diferentes maneras de contacto. Además de facilitar la información de contacto en el caso de que lo necesiten, también da mayor seguridad y confianza. Para muestra, un botón: